Unos días antes de las vacaciones difrutamos de una magnífica jornada liderada por algunos de nuestros futbolistas. Estos equipos que cuando pisan el terreno de juego tienen claro que salen a ganar el partido. Pipiolos que se entregan en cuerpo y alma minuto a minuto, buscando al compañero y escuchando a su entrenador para realizar la jugada perfecta; ese equipo, siempre gana.
GANA admiración, ovaciones y vítores que se generan entre el público, y que resultan ser las mejores sesiones semanales de “risoterapia” para todos los asistentes.
¡¡VIVA EL DEPORTE!!